En medio de la creciente tensión global tras el bombardeo de Estados Unidos a tres instalaciones nucleares en Irán, el Gobierno argentino expresó su respaldo a la ofensiva liderada por la administración de Donald Trump. Aunque no hubo un pronunciamiento institucional formal, funcionarios clave y el propio presidente Javier Milei se posicionaron a favor de la acción.

El primero en manifestarse fue el ministro de Defensa, Luis Petri, quien publicó un mensaje en su cuenta de X (ex Twitter):

“Garantizar la paz en el mundo es luchar, siempre y en todo lugar, contra el terrorismo y sus armas nucleares. ¡Mañana el mundo despertará más libre y en paz! Fuimos víctimas del terror de Irán y lo pagamos con sangre de inocentes”, escribió, aludiendo a los atentados a la embajada de Israel y la AMIA en Buenos Aires.

Petri agradeció además al expresidente estadounidense y remató:

“Estamos en el lado correcto de la Historia, ¡del lado de la Justicia!”.

A ese mensaje se sumó el del subsecretario de Prensa, Javier Lanari, quien sostuvo:

“Solo hay que ver quiénes son los que apoyan a Irán para advertir que la Argentina está del lado correcto de la historia”.
Y agregó:
“Estados Unidos e Israel están al frente de la defensa de la cultura judeocristiana, Occidente y el capitalismo”.

Ambos mensajes fueron reposteados por Javier Milei, quien aunque no emitió declaraciones oficiales, publicó una frase con su tono habitual:

“No desesperar por el ruido zurdo. Si ser zurdo es una enfermedad del alma que ni siquiera les permite ver los hechos, mucho menos podemos pedir que vean un contrafáctico —por más obvio y evidente que sea”.

Si bien la Oficina del Presidente y la Cancillería argentina no han emitido aún ningún comunicado oficial, estas publicaciones reflejan el alineamiento ideológico y estratégico del Gobierno con Washington y Tel Aviv frente al conflicto en Medio Oriente.

Desde su entorno, Milei aclara que sus reposteos “no siempre equivalen a una opinión directa”, sino que buscan “poner en agenda temas que los grandes medios prefieren omitir”. Sin embargo, las expresiones de Petri, Lanari y el propio presidente dejan en claro de qué lado del tablero se ubica Argentina ante una nueva escalada geopolítica global.