La coordinadora y concejal electa en José C. Paz, María Amoroso, conocida en redes sociales como Mía Amoroso, fue acusada por militantes de vender las entradas para el Movistar Arena que eran para los militantes libertarios de José C. Paz, quienes se quedaron afuera.

La militancia estalló de furia contra la dirigente por su accionar, y algunos referentes libertarios comenzaron a hablar de los oscuros métodos que utiliza desde hace años para conseguir lo que quiere.

Desde su incursión en la política, se ha dedicado a defenestrar a quien le haga sombra o le quite protagonismo en su camino hacia sus objetivos políticos: “Siempre en los grupos en los que participó quería llevar agua para su molino y, si no eras funcional a ella, te inventaba cosas”.

“Trataba de llegar vinculándose con influencers libertarios, pero a la mayoría de los que estuvieron con ella los ensució mintiendo para sacar provecho, extorsionándolos”, afirma un referente libertario.

Uno de los perjudicados por Mía Amoroso fue Adrián Martínez, “El Dipy”, con quien Mía había tenido un romance; aseguran que al poco tiempo lo perjudicó inventando una falsa denuncia de abuso sexual. También operó contra el influencer libertario El Herrero Liberal, con quien Mía también tuvo una relación amorosa y fue otro blanco de sus operaciones.

En la mayoría de los lugares donde estuvo, tuvo conflictos y, dentro del mismo ambiente libertario, la tildan de “mala leche”. Por eso, incluso en espacios de streaming libertarios, la consideran persona no grata y no es bienvenida.

Entre las libertarias también tuvo conflictos: la definen como una resentida y envidiosa, a quien es mejor no tratar por su tendencia a mentir compulsivamente sobre cosas que nunca sucedieron. Eso le pasó a la influencer libertaria de Neura, Eliana Cére, quien fue agredida por Amoroso sin motivo alguno.