La temporada 2025 de la NFL ha estado marcada por una gran imprevisibilidad, con favoritos al Super Bowl rindiendo por debajo de las expectativas y equipos sorpresa emergiendo con fuerza.

Esta tendencia se acentuó en la Semana 15, donde la lucha por los playoffs dejó partidos emocionantes, remontadas inesperadas y lesiones graves a estrellas clave.

El domingo culminó con un golpe devastador para los Kansas City Chiefs, que no solo perdieron ante los Los Angeles Chargers, sino que vieron cómo su era dominante llegaba a un abrupto final.

Los Chiefs cayeron 16-13 ante los Chargers en Arrowhead Stadium, quedando oficialmente eliminados de los playoffs por primera vez desde 2014 y rompiendo una racha de 10 apariciones consecutivas en postemporada.

sto incluye el fin de siete finales de conferencia AFC seguidas, cinco Super Bowls en seis años y tres títulos. La peor noticia llegó en el cuarto cuarto: Patrick Mahomes sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior (LCA) en su rodilla izquierda al ser tackleado por Da’Shawn Hand mientras intentaba lanzar el balón fuera de bounds.

El quarterback tres veces campeón del Super Bowl se tomó la rodilla con evidentes gestos de dolor y necesitó ayuda para salir del campo. Una resonancia magnética confirmó la rotura del LCA, terminando la temporada de Mahomes, quien explorará opciones quirúrgicas.

El jugador expresó en redes: “No sé por qué tenía que pasar esto. Duele, pero confiaré en Dios y atacaré la rehabilitación. Volveré más fuerte”. Gardner Minshew entró en su lugar y generó esperanza con pases consecutivos, pero una intercepción a Travis Kelce sellada por Derwin James Jr. cerró el partido.

Las roturas de LCA suelen requerir 9-12 meses de recuperación, poniendo en duda su disponibilidad plena para el inicio de 2026 y marcando el posible fin de la dinastía de los Chiefs en la era Mahomes.