
Política | Ayer
Proyecto paralizado
Mercedes en la mira: la construcción del cuartel de bomberos aún no comenzó pese al financiamiento
Concejales oficialistas defendieron la urgencia de la obra, pero hoy sólo se observan huellas mínimas en el terreno y un cartel deteriorado.

Seis meses después del escándalo que sacudió a Mercedes, provincia de Buenos Aires, por la liberación de 510 mil dólares para la supuesta construcción urgente de un nuevo cuartel de bomberos en la periferia (valorado entre 20 mil y 50 mil dólares), la situación no ha mejorado.
Apenas se removió un poco de tierra, con un movimiento tan ínfimo que parece más propio de un agricultor del siglo 18 utilizando un arado manual que del inicio de una obra pública millonaria.
El desembolso se concretó en abril bajo la gestión del intendente Juan Ignacio Ustarroz, impulsado por concejales de Fuerza Patria. Sin embargo, a esta altura, ni un solo cimiento se ha colocado, a pesar de que se hablaba de suma urgencia al momento de aprobar el acceso a los fondos.
La “urgencia” que justificaba semejante transferencia de fondos se desmorona ante un predio vacío, con huellas de maquinaria mínima y sin ningún avance concreto.
El caso continúa afectando tanto al oficialismo como a la oposición. Esta última, aunque votó en contra del proyecto en el Concejo Deliberante, se restringió a críticas mediáticas y no llevó la denuncia a la justicia, a pesar de los antecedentes de sanciones del Tribunal de Cuentas contra la misma gestión por desvío de fondos.
El aspecto más alarmante sigue siendo la discrepancia entre el dinero aprobado y el valor real estimado de la obra. Mientras se calculaba que construir el cuartel costaría entre 20 mil y 50 mil dólares, el Concejo autorizó un presupuesto diez veces mayor: medio millón de dólares.
Mientras tanto, el terreno permanece casi intacto y, paradójicamente, los bomberos siguen apelando a la solidaridad vecinal para recaudar fondos y construir el cuartel que el Estado ya ha financiado con creces.
En síntesis: después de seis meses, más de medio millón de dólares fueron destinados bajo el pretexto de una obra “urgente” que nunca se inició. Lo único visible es un terreno abandonado con un par de surcos en la tierra y el recuerdo de un cartel oficial que hoy se encuentra destruido por el paso del tiempo y la desidia.
